viernes, 31 de octubre de 2008

Democracy works


Con este artículo no pretendo ofender a nadie, está enteramente escrito en tono irónico, simplemente estoy en desacuerdo con todo lo mostrado en el anuncio que comento y en las políticas que defiende. Espero que nadie se sienta molesto u ofendido por el contenido.


No tengo palabras para definir el documento social que encontré por casualidad navegando por You Tube. Me habían hablado de dicho documento, me mencionaron sus virtudes dialécticas, su profundo mensaje antibelicista y demás maravillas que le acompañan.

Pero no ha sido hasta mi primer visionado (y el segundo, y el tercero...) que he llegado a comprender hasta qué punto ha influido en mi juicio y criterio personal este maravilloso pedacito de filosofía moderna, contenido en cuarenta y siete excelsos segundos -de los cuales, cada uno es pura y bendita gloria, un éxtasis para los sentidos-.

Y es que el anfitrión -una grandiosa personalidad pública, cargada con más saber y conocimientos que cualquier Schopenhauer, Nietzche o Platón-, llenando con su presencia la pantalla -por otro lado, no muy grande en cuanto a tamaño, You Tube es lo que tiene-, nos transmite un discurso repleto de sabiduría, perfecta muestra de hasta qué punto la cultura americana supera a la europea. ¡Que se esfumen la Ilustración y demás patrañas! Al lado de este fragmento de vídeo, caen en el ridículo más espantoso.

Y es que, ¿quién quiere llamar al 911, pudiendo guardar en su casa una preciosa Colt 45? ¿Acaso servirá de algo la policía cuando una banda de malhechores ataquen despiadadamente a tu familia? ¿Para qué llamarlos, si contamos con un arsenal en casa? En estos casos, ¡lo mejor es disparar primero y preguntar después, claro que sí! Y ya puestos, ¡cariño, tráeme el lanzagranadas!

Aunque claro, el ilustre pensador que nos lanza semejante perlita no necesita armas. Por favor, ¿acaso necesita armas el único hombre que...

...consiguió que Dios le pidiera algo "por favor"...

...provocó el Big Bang con una patada giratoria...

...y es capaz de anunciar algo relacionado con un tema de total vigencia y trascendencia como este y conseguir que el anuncio tenga un aire de caspa/Serie B sin apenas esfuerzo?

No necesita armas, con una patada giratoria tiene muchísimo más que de sobra.

Por tanto, y en vista del mensaje que nos lanzan él y la NRA (Asociación Nacional del Rifle), solo puedo decir una cosa:

¡Qué huevos, señores!

Encima, todo con música de Spaghetti Western. Ahí, arrasando. Luego
pasa lo que pasa.

Michael Moore será un demagogo, pero tenía razón, al fin y al cabo.

Sin más dilación, la "obra de arte absoluta" para vuestros paladares:





Para haceros digerir el mal trago, en exclusiva, os presento al único "hombre" sobre la faz de la tierra capaz de matar a Chuck Norris. Con una simple mirada (aparece a partir de 0:39):



jueves, 30 de octubre de 2008

El caos-Parte 2


Por poner un claro ejemplo: el tiempo. ¿Recordáis la teoría de la relatividad de Einstein? Es pura ciencia, señores: cuando vamos sobrados de tiempo, acabamos demasiado rápidamente aquello que tengamos que llevar a cabo; en cambio, si vamos justos, surgirán mil inconvenientes, fallos y pifias varias que nos llevarán inexorablemente a ver destruido en mil pedazos nuestro "impecable, preciso y maravilloso" Planning. Murphy estuvo en lo cierto desde el primer momento.

Esto nos ocurrió ayer durante el rodaje que teníamos previsto de 15:00 (hora a partir de la cual dejarían en nuestras inexpertas manos un equipo considerablemente profesional: una cámara de vídeo Betacam HDV MiniDV de marca Sony, un micrófono para incorporarlo a la cámara en el momento de entrevistar a alguien, y un trípode que creo pesaba media tonelada -permitidme la exageración, mi espalda así lo atestigua-) a 18:00 de la tarde. El rodaje tendría lugar en el famoso Mercat de la Boqueria de Barcelona. Pues bien: ¿No había días mejores para que eligiera llover? No, al parecer no, pues nos llevamos una buena ducha fría -y es que ¡nada hay mejor que cargar equipo pesado (y caro) al tiempo que te mojas! ¡Un ejercicio de lo más sano!-. Aparte de dicho inconveniente, se nos planteó otro: proteger la cámara del agua -no, no era impermeable pese a ser de Alta Definición. No se puede tener todo en esta vida-. Al no tener funda, recurrimos a una solución tan básica y rudimentaria que casi me produce vergüenza admitirlo: usamos una bolsa de basura prestada (¡Y bien que nos fue!)

Más problemas: un vigilante pidiéndonos permiso de rodaje -Un consejo a los novatos: si queréis rodar en un sitio público (especialmente en la Ciudad Condal, y en un espacio oficial), rodad sin trípode. Es una laguna legal, ya que si ruedas sin trípode, es considerado legalmente como rodaje "amateur". Os ahorraréis muchos problemas-, dependientes/as y jefes/as que no querían nuestras cámaras cerca de sus establecimientos, más lluvia, desplazamientos... Por suerte, el tiempo no se nos echó encima, eso que ganamos.

Estos problemas -el Caos, recordad- los solucionamos con el mejor Plan B que jamás existirá en el mundo de los rodajes. ¿Queréis saber cual es? Allá va: echarle cara. Gracias a unas dosis considerables de desparpajo, conseguimos unas entrevistas bastante jugosas, buenos planos robados, alguna que otra panorámica más que decente, y sobretodo, la satisfacción del trabajo bien hecho. Porque esto es un rodaje: no se trata de que todo salga tal como lo has planeado, si no de poder hacerlo directamente, y si se hace bien, ¡mejor! Porque en un rodaje, nadie te garantiza que consigas acabar siquiera. ¡Que se lo digan a Coppola!

Esto, a fin de cuentas, es el Caos.

El caos-Parte 1


Muy buenas. Para dar comienzo a este blog, he elegido la manera más pretenciosa/pedante/"autobombística" de cuantas podría haber elegido: comenzaré hablando sobre el Caos, entendido como fenómeno visto en su estado natural, en estado propio.

¿Y qué mejor forma de definir el caos hay, que hablar sobre un rodaje? No hablo solamente de un rodaje cinematográfico, si no que dicho caos también es aplicable a la televisión y a los spots publicitarios.

En un rodaje, para empezar, todo, absolutamente todo depende de la planificación. Bendita palabra, sí señor: Planificación. Sería algo así como el Cosmos, aquello que da orden -o mejor dicho, intenta "dar orden"- al Caos. Muchos se amparan en el trabajo de preparación previo a la ejecución casi de forma obsesiva; ningún Planning, ninguna escaleta ni "separata" es suficiente para este tipo de personas. Debería aclarárseles un par de cosillas:

-Una excesiva preparación puede irse al traste en caso de que surja una complicación que rompa dicha -valga la redundancia- preparación. Por tanto, siempre es bueno dejar alguna cosa libre de cara a posibles contratiempos/imprevistos, y preparar un Plan B, y, si conviene y hay tiempo, no estaría de más preparar un Plan C.

-Por muchos Planes (Plan B, C, D... y así podemos pulirnos el abecedario completo) que tengamos, siempre predominará el Caos. Es inherente a cualquier rodaje, de modo que lo mejor es asumirlo de antemano -y si uno no se ve capaz de trabajar con esta condición, mejor será que se plantee dedicarse a un oficio más estable. La horticultura, por ejemplo-. Por mucho que nos empecinemos en tenerlo todo controlado, dicha voluntad quedará anulada por el desorden que siempre suele producirse durante un rodaje.

Por tanto -y esto es algo que cualquier "perro viejo" (o bien cualquiera que haya rodado/intentado rodar sin presupuesto o medios) afirmará-, la Planificación es un mero placebo contra el Caos, necesario, sí -de hecho, más que necesario-, pero placebo al fin y al cabo.

Continuará en Parte 2